Ser parte de una de las bandas de rock más exitosas como Kiss, implica riesgos, es algo que el bajista Gene Simmons ha aprendido de la manera más dura a lo largo de los años.
Gene estima que se le encendió el cabello seis o siete veces, comenzando el 31 de diciembre de 1973, cuando debutó con su truco de escupir fuego, cuando la banda tocaba “Firehouse”.
Resulta que esto no es solo un problema que afecta a los miembros reales de la banda, ocurre también en las presentaciones en las que homenajean a Kiss. De hecho, el wannabe de Paul Stanley tuvo llamas en su cabello esta semana.
Ocurrió en Sioux City, Iowa, cuando una chispa de pirotecnia aterrizó en el cabello del cantante imitador de Paul, mientras interpretaba “Detroit Rock City“. Sin embargo, el hombre es claramente un profesional, porque en lugar de detener la canción siguió cantando mientras los roadies apagaban las llamas. No en vano, a la multitud le encantó.
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