Sam Smith está acostumbrado a mostrarse vulnerable en su música, pero ahora se abre acerca de sus luchas pasadas relacionadas con su imagen corporal.
El cantante de “Unholy” habló recientemente con The Sunday Times sobre lo “fabulosos” que se ven y se siente después de luchar contra la dismorfia corporal en el pasado, todo lo cual culminó con su decisión de posar en topless para su reciente álbum “Gloria”, según People.
“Dentro de mi industria definitivamente hay preguntas de ‘ ¿Cómo debería ser una estrella del pop?'”, dijo el músico de 30 años, y agregó que nunca se ajustan realmente a la “norma” comúnmente elogiada por la sociedad.
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No fue hasta 2018, después de su gira “Thrill of it all”, que Smith tomó medidas para abordar cómo se sentían y esencialmente se obligó a sí mismo a enfrentar su dismorfia corporal de frente. Según la Clínica Mayo, la dismorfia corporal es un trastorno de salud mental en el que una persona no puede dejar de pensar en un defecto percibido, lo que genera angustia y ansiedad.
“Cuando tenía 25 años salí exhausto de la gira. Busqué modelos a seguir en el mundo. Cada vez que estaba en una piscina me sentía cohibido, pero me obligué a descubrirme la parte superior”, dijo, y agregó que parece haber tenido un efecto positivo. “Valió la pena porque ahora tengo lo opuesto a la dismorfia corporal. Me veo fabuloso. Finalmente me estoy bronceando. Estoy quemado en lugares en los que nunca me había asoleado”.
Smith también habló sobre sentirse “liberado” en su música, diciendo que “me acerco más a lo que soy con cada álbum” y “Gloria” se inspiró en el “espíritu femenino que hay en mí”.
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“Soy más feliz en mi propia piel en Gloria. Me libre, libre de las presiones que sentía cuando era joven”, dijo. “Mi madre dice que, a medida que envejecí, dejó de importarme tanto lo que la gente piense. Ella tiende a tener razón”.
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Texto: Sarah Tate
