Hacer videos musicales es el procedimiento operativo estándar para cualquier artista, pero ese no fue el caso antes de 1988.
En una entrevista reciente relativa a la reedición del disco “And Justice for All” de Metallica, la banda recordó sus reservas de la época en que grabaron el video de su canción “One“.
En ese momento, Metallica sabía que lanzar un video musical y potencialmente llegar a MTV se interpretaría como una traición por parte de algunos de sus fans. Después de reflexionar los pros y contras con su administración, la banda aceptó hacer el video y “One” se convirtió en un éxito legítimo.
James Hetfield, el frontman de la banda, habla acerca del éxito: “Creo que hubo un momento en el que estuve en el Stone on Broadway en San Francisco para ver una banda, una banda de metal”, recordó. “Un niño se me acercó y me escupió y me dijo: ‘Te has vendido, has hecho un video‘. Y allí mismo, dije: ‘Sí, lo hicimos, j&%$#”.
Para entonces, Metallica había reflexionado acerca de su decisión. Y mientras que la banda no quería ser agrupada con “Asia o Toto”, como dijo Hetfield, también vio una oportunidad demasiado importante como para dejarla pasar.
“Ahí fue cuando comencé a darme cuenta: ‘De acuerdo, puedes quedarte pequeño y en esto, pero si tienes algo que decir que es realmente importante, necesitas utilizar estas cosas'”, continuó. “Ya sea que se trate de video, de Internet, lo que sea que se nos presente, una película, eso es lo que tienes que hacer. Tienes que hacerlo”.
El baterista, Lars Ulrich habló acerca de la consternación y la eventual lógica de la banda ante la idea de lanzar ediciones individuales o de radio para las pistas del álbum.
“La cosa siempre fue, si esto puede abrirse y traer más gente, los expondrá a lo que estamos haciendo”, explicó Ulrich. “Luego descubren el registro, luego descubren a (Master of) Puppets, luego descubren (Ride the) Lightning, luego a Slayer, después descubren Diamond Head, luego descubren Mercyful Fate”.
Añadió que los principales sellos discográficos en Estados Unidos no estaban “sirviendo” en el mercado de la música pesada y, como resultado, el público en general no tenía idea de que existía tal mundo.
